Cada 17 de marzo, en muchas ciudades del mundo se celebra este día en conmemoración a la muerte de San Patricio (S. IV-V)

Este santo nacido en Escocia, llega a las costas de Irlanda cuando era apenas un adolescente, capturado  como esclavo para cuidar rebaños de ovejas. Luego de 6 años de penoso cautiverio, logra escapar pero ya mayor, regresa a Irlanda convencido que debe evangelizar a sus habitantes que en esos tiempos profesaban la mágica religión celta, la de los druidas.

Se generan numerosas leyendas que son hoy los símbolos de este día, como la del trébol de tres hojas con la que el santo explicaba de manera simple el concepto de la Santa Trinidad o la de los famosos “leprechaun”, duendes que según cuenta la leyenda fueron enviados por los sacerdotes druidas para molestar y gastar travesuras a todos los cristianos.

¿Pero cómo surge  y se hace famosa esta fiesta?  Fueron los inmigrantes irlandeses en Estados Unidos quienes para recordar su añorada tierra, organizan un primer desfile en la ciudad de Boston en el año 1737. Nueva York toma la idea y le sigue en el año 1762. Ya en el siglo XX, Chicago suma una nueva práctica que se convierte en otra tradición, al pintar el río de verde, tan verde como Irlanda. También en el siglo pasado se suma la costumbre  teñir la cerveza rubia irlandesa agregándole un tinte azul que al mezclarse con el dorado de la bebida da el verde característico.

En estos desfiles proliferan las melenas  y barbas pelirrojas, los ya mencionados leprenchaun y se bebe mucha cerveza.

Recién en el año 1931 llega la costumbre a Irlanda, aunque con prohibición de hacer festejos paganos hasta que las medidas se libera a mediados de siglo XX.

Conociendo un poco la historia, lo que ahora queda es disfrutar de este original día y para vivirlo con autenticidad, nada mejor que viajar a Dublín, la capital de Irlanda. No se debe olvidar incluir en el equipaje todo lo verde o bien pasar por algunas tiendas de la ciudad como  Dublin Carrolls Irish Gifts, en  Lower Liffey Street o en Grafton Street y provisionarse de estrafalarios sombreros verdes, pelucas, tréboles hasta ropa vintage

Ataviado así la consigna es visitar muchos pubs, comer lo típico acompañado de la cerveza y la infaltable música en vivo, mezclarte con los locales y la diversión está asegurada.  

Este año como es de esperar, los desfiles han sido cancelados, por lo que te invitamos a participar de las celebraciones virtuales transmitidas por un canal en internet accesible desde la web del festival. https://www.stpatricksfestival.ie/

De Silvia Socci

Para Destefanis Travel